Libro III: Epilogo, Parte III: Renacer
Zerge estaba al límite, no podría atacar más, sus reservas de energía estaban a un atacar de extinguirse llevándose su alma con ello. Gina se encontraba mal herida a como pudo se acercó a Zerge. Dos de los dos grupos habían quedado inhabilitados, la misión se había hecho suicida y las esperanzas se estaban muriendo con ella. Finalmente el plan B entró en marcha, todos escucharon el llamado de auxilio de Sunny y Raphael y ya no había nada más por hacer. La lucha se había tornado en una batalla dual, la resistencia contra los demonios y la humanidad contra sus propios sentimientos, sus ganas de seguir viviendo. Nadie daba el brazo a torcer, ejecutar la otra vía significaría destruir todo cuanto conocen, incluso a ellos mismos, a fin de darle a los pilares del tiempo la suficiente libertad para que se recargaran y el mundo volviera a brillar. Los otros grupos informaron de su situación, acercarse al pilar del tiempo a un kilómetro era el mayor milagro que podrían realizar, la fu